Éstos son unos recuerdos sonoros y visuales de aquellas fiestas musicales.
¡Ésta es la historia de Los Tinos! |
Con María la australiana en la voz, Gianfranco el uruguayo en el saxofón y el piano, Pedro el portugués en la guitarra, Javier el costarricense en el bajo y Javier el español en los tambores. ¡Un grupo típicamente parisino! |
21 de octubre de 2003. Gianfranco, Javier, Pedro y Javier coinciden en un concierto de la pianista Carla Bley, en la sala New Morning de París. Unas semanas más tarde, durante uno de los primeros ensayos en los estudios Luna Rossa, en el distrito 13 de la capital, María decide que no quiere ser una simple groupie sino la cantante del grupo. ¡Los cuatro músicos están encantandos! Y empiezan unos cuantos meses de ensayos confidenciales. |
El grupo se concentra primero en los estándares de jazz, pero pronto incursiona en otros territorios: una samba minimalista, un buen rock, un lindo bolero alternativo, une bossa nova triste, rico funky, etc. Unos temas originales van completando el repertorio. Todo eso cantado en inglés, español o francés por María y los chicos. |
Junio de 2004. El trompetista Etienne se une al grupo durante unos meses y Los Tinos hacen sus primeras apariciones públicas. Pero sólo se trata de un preludio... |
Noviembre de 2004. Empieza una residencia de un año en Les Folies du Luxembourg, un local del Barrio Latino que el público de Los Tinos va a llenar hasta los topes cada mes. |
Abril de 2005. Concierto « unplugged » en La Pomme d'Eve, pequeño antro medieval del Barrio Latino. Esta fórmula más intimista tiene mucho éxito. Un año más tarde, Los Tinos grabarían su disco en ese lugar. |
Julio de 2005. Los Tinos deciden embarcarse en el Kiosque Flottant, uno de los barcos musicales del muelle de la Estación, al pie de la Biblioteca Mitterrand, para una serie de conciertos. De nuevo, el público monta unas fiestas extraodinarias, bajo el impulso de Aurélie y Dorothée, las presidentas del fan club de Los Tinos. |
21 de junio de 2006. Los Tinos se despiden de su público querido con un concierto en la calle Abbé-de-l'Epée, cerca del jardín del Luxemburgo, en el centro de París. |
Éstos son unos recuerdos sonoros y visuales de aquellas fiestas musicales. |
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